Una estrategia comercial y minorista de éxito utilizando los KPIs

La información y un conocimiento profundo del funcionamiento de los productos de una empresa son esenciales para cualquier negocio que opere en el sector minorista.

A final de mes, muchos negocios sólo controlan las dos métricas de volumen de ventas y beneficios porque desconocen lo que ocurre en sus puntos de venta.

Dado que será difícil mejorar nuestras estrategias de venta al por menor si no somos capaces de calibrar la verdadera amplitud de nuestros objetivos con los KPIs adecuados, es crucial que hagamos una pausa y evaluemos el estado actual de nuestra organización.

¿Qué significan los KPIs en el comercio minorista?

El nivel de eficacia de la implantación de su punto de venta viene determinado por los indicadores clave de rendimiento (KPI).

Son un conjunto de medidas que muestran si se han alcanzado los resultados previstos, su organización ha logrado los mejores resultados y, en consecuencia, nuestros clientes han tenido las mejores experiencias.

Una de las principales ventajas de desarrollar KPIs para el comercio minorista es que ayudan a garantizar que haya un suministro suficiente de bienes para satisfacer la demanda de los consumidores.

Si cuenta con una sólida estrategia comercial y de venta al por menor en el punto de venta, es probable que los minoristas favorezcan la promoción de sus artículos frente a los de sus rivales.

Le ayudarán a establecer relaciones con las personas adecuadas, lo que le ayudará a promocionar sus artículos en el futuro. 

La promoción en punto de venta se definirá y mejorará gracias a los conocimientos que obtenga a través de los KPIs sobre los deseos de los consumidores.

Los KPIs del comercio minorista le ayudarán a conseguir más ventas y a ampliar su negocio.

¿Qué KPIs hay que tener en cuenta al desarrollar una estrategia de punto de venta?

Los KPIs deben comprobarse periódicamente para saber si su empresa va en la dirección correcta.

Tasa de conversión

Muestra la relación matemática entre el volumen de transacciones y el volumen de visitantes. 

Con la ayuda de este KPI, se puede determinar cuántas personas entran en un negocio y cuántas realizan compras.

Esta estadística es esencial para mejorar todas las operaciones de la tienda, incluida la gestión del inventario, la distribución de productos, las zonas calientes, etc.

Ventas

Este es el KPI de rendimiento más importante para una tienda minorista. Cuantifica la cantidad de ventas durante un periodo de tiempo específico, como su nombre indica.

Ventas por categoría

Sirve como indicador a nivel de existencias. Con ayuda de esta estadística, es posible identificar las mercancías que tienen más y menos unidades en el almacén, así como las categorías a las que pertenecen. La gestión de los inventarios depende de este KPI.

Rotación de inventario

Este KPI del comercio minorista calcula el número de veces que un producto se queda sin existencias en un año determinado. 

Con este conocimiento, el promotor de mercadeo puede evitar el exceso de inventario y gestionar la falta de disponibilidad de un producto en un entorno minorista.

Ruptura de ventas

Calcula la proporción del crecimiento de la tasa de ventas prevista de los productos cuya oferta era insuficiente para cumplir la proyección de ventas.

Proporciona una estimación de cuánto se ha dejado de vender por no disponer de existencias suficientes para satisfacer la demanda. Además, tiene un propósito de alerta que nos permite ajustar la oferta por tienda.